Las previsiones climatológicas no se han cumplido y la humedad no ha bajado todo lo esperado, explican desde la Genealitat
El incendio declarado este domingo en la Serra Ferrer,
entre Tàrbena y Xaló (Alicante) y que anoche había quemado ya unas 800
hectáreas continúa hoy activo tras una noche «compleja» para los
efectivos de extinción, informa el Centro de Coordinación de Emergencias
de la Generalitat Valenciana.
La misma fuente recalca que se ha priorizado la seguridad
del personal para evitar situaciones peligrosas debido a las carreras
que pudiera producirse. Tras haberse producido ayer la evacuación de
unas 180 personas, no hay constancia de más desalojos.
En cuanto a los medios movilizados, ya se encuentran
trabajando 6 aéreos, 12 dotaciones de Bomberos de la Diputación de
Alicante, 2 coordinadores forestales, 10 unidades de lso Bomberos
Forestales de la Generalitat, más 3 helitransportadas y equipos de la
UME.
El secretario autonómico de Seguridad y Emergencias,
Javier Montero, ha agradecido todo el trabajo realizado por estos
efectivos y ha detallado que ha permanecido durante toda la noche una
llama activa en zonas principalmente no accesibles.
«Las previsiones climatológicas respecto a la humedad no
se han cumplido y, por lo tanto, no ha bajado todo lo esperado, por lo
que ha sido una noche de poco avance», ha manifestado.
Antonio Córdoba, suboficial del Consorcio Provincial de
Bomberos de Alicante, ha explicado que el problema durante la noche ha
sido la «inversión térmica» y que hasta que no si disipe no podrían
entrar los medios aéreos. También ha remarcado que entonces incidirán en
la zona del Barranc de Saco, que es el principal foco activo, ya que en
la zona del Coll de Rates los trabajos evolucionan favorablemente.
El fuego, que se originó sobre las 12 horas del domingo,
hizo que seis medios aéreos y una veintena de equipos de bomberos se
movilizaran con urgencia hasta el lugar. El Centro de Coordinación de
Emergencias estableció la situación 2 del Plan Especial Frente al Riesgo
de Incendios Forestales ante la posibilidad de que el fuego afectara
gravemente a los bienes forestales, como sucedió poco después.
El incendio arrasó una zona de masa forestal en pocas horas y progresa
con rapidez, por lo que acudieron todos los medios antiincendios que
estaban en la alerta en la comarca de la Marina Baixa. Una de las
primeras personas que llamó al 112 fue el diputado de Les Corts Gerard
Fullana, que estaba haciendo deporte con su mujer en el paraje
montañoso.
«Desde lejos parecía que ardían restos de poda. Si se
confirma que es el foco del incendio estamos ante otra grave
imprudencia, porque las quemas agrícolas estaban prohibidas hoy», afirmó
Fullana. «Cuando he llamado al 112 (12:17 horas) me han dicho que era
la primera persona que avisaba de la columna de humo. Ha sido casual
porque estaba corriendo con mi mujer por un camino», añadió el diputado
de Compromís por Alicante.
Media hora después de la llamada que Fullana realizó al
teléfono de emergencias, llegó el primer helicóptero a la zona del
incendio. El 112 recibió más avisos en pocos minutos. La columna de humo
era visible desde poblaciones lejanas.
Algunos de los bomberos que estaban enfriando la zona afectada por otro
incendio en Xàbia y Gata de Gorgos, se desplazaron con urgencia a
Tàrbena para luchar contra las llamas. Mientras los efectivos
antiincendios trataban de cercar el fuego, unos 170 vecinos tuvieron que
abandonar sus casas en los municipios de Tàrbena y Parcent. Cruz Roja
Alicante y el Ayuntamiento de Tàrbena habilitaron un albergue en la Casa
de la Cultura para atender a las personas evacuadas.
Además de los bomberos forestales, se movilizaron otras
11 dotaciones de los parques de Dénia, Benissa, Cocentaina, San Vicente y
Elda del Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante, y la dirección
técnica del operativo antiincendios ha solicitado apoyo a la Unidad
Militar de Emergencias (UME).
Los servicios de emergencias desalojaron algunas
viviendas diseminadas debido a la cercanía de las llamas. El Centro de
Coordinación de Emergencias solicitó apoyo también a Cruz Roja para el
establecimiento de un albergue provisional en la localidad de Tàrbena
donde puedan desplazarse las personas afectadas.
El incendio y la circulación prioritaria de los vehículos
de los servicios de emergencias obligó a cortar el tráfico en la
carretera CV-715, según informaron fuentes de la Guardia Civil de
Tráfico.
Tras recibir la solicitud de ayuda, el Tercer Batallón de Intervención en Emergencias
(BIEM III) movilizó a un centenar de militares, que se desplazaron con
urgencia a Tàrbena para luchar contra el fuego y realizar distintas
tareas de transmisiones y logística. También se unieron a las labores de
extinción dos aviones anfibios del Gobierno.
El Centro de Información y Coordinación de Urgencias
(CICU) envió tres ambulancias al puesto de mando avanzado, concretamente
dos equipos del Servicio de Ayuda Médica Urgente (SAMU) y otro de
Soporte Vital Básico (SVB).
La consellera de Justicia e Interior, Elisa Núñez, y la
delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, se
trasladaron hasta el puesto de mando avanzado para seguir de cerca las
labores de extinción del fuego, que el domingo por la noche seguía
activo.
«Se ha declarado el nivel 2 del Plan Especial de Riesgos
de Incendios Forestales por las altas temperaturas que se han dado a
partir de mitad de la mañana, también por la orografía de la zona, y
luego por la alta cantidad de masa forestal, dado que parece ser que la
gestión del anterior Gobierno no había sido la que correspondía y ha
sido bastante negligente. En consecuencia ha corrido como un polvorín
que era lo esperado», manifestó Núñez.
A las 19:30 horas, Francisco Molines, alcalde de Tàrbena,
seguía muy pendiente de la evolución del fuego. Según declaró a LAS
PROVINCIAS, las primeras informaciones de testigos sobre el origen
apuntan a una posible negligencia, «una quema de poda de restos de
naranjos que se ha descontrolado».
Sucedió en la partida de Casas Ibáñez, a unos tres
kilómetros en línea recta de la población de Tàrbena, donde viven 630
vecinos. «Parece que el fuego se ha propagado por unos bancales de
cultivo abandonado», señaló el primer edil, «y de ahí ya ha alcanzado el
monte».
En cuanto a los desalojos, Molines detalló que el mayor
peligro estaba para una veintena de chalés y casas de campo próximas al
punto de origen, en un radio aproximado de unos tres kilómetros.
«Alrededor de 50 residentes de esta zona se han desplazado al pueblo.
Hemos montado un albergue en la Casa de la Cultura y algunos se quedarán
ahí hasta el momento de la extinción y otros permanecerán con amigos o
familiares en el pueblo», añadió.
Poco antes de las 20 horas «daba la impresión de que el
fuego no iba a más y su avance seguía en dirección a los pueblos vecinos
de Parcent y Xaló», destacó Molines. El incendio también puso en jaque a
los vecinos de Parcent. Como describió su alcalde, Joan Ripoll, fueron
evacuadas 120 personas de dos urbanizaciones próximas al foco. Una de
ellas es Coll de Rates, a unos 500 metros del casco urbano de la
población. Unas 70 personas abandonaron sus viviendas por prevención.
Mientras, en Barranquet, a unos 300 metros de Parcent, fueron 50 los
desalojados.
Al igual que en la vecina población de Tàrbena, «algunos
se han refugiado con familiares y amigos. Y para los que no hay opción
se ha habilitado un centro polivalente por si tienen que pasar allí la
noche mientras dura la extinción». La solidaridad se impuso una vez más y
los vecinos de Parcent llevaron colchones y ropa de cama.
En cuanto a la evolución, pasadas las 20 horas Ripoll
mencionaba que la franja principal de fuego «parecía más o menos
contenida en la parte alta del término municipal, pero había algunos
rebrotes en Coll de Rates y en otro punto conocido como la Sierra
Carrascal». Y también «da la impresión de que está entrando en Xaló».