Cantabria es una de las regiones en las que el viento ha azotado con
más fuerza y más ha llovido de todo el país
Hasta la una de la tarde
continúa activada la alerta por intensas precipitaciones y fuertes
rachas de viento
El otoño se ha estrenado en Cantabria con su primer temporal, llegado
desde el Atlántico y barriendo toda la cornisa. Ya avisaba Aemet de que
la noche sería dura en todo el litoral. Y lo fue. Las olas de la tarde
dieron paso al viento, y el viento a la lluvia, y el trío se alió en una
madrugada desapacible, que hizo cumbre a las seis de la mañana, momento
en el que soplaron rachas de 96 km/h en Santander, la
segunda más fuerte del país, solo por detrás de las registradas en
Machichaco (Vizcaya), donde el vendaval alcanzó los 136 km/h. Y también
ha llovido bastante. Santander, en este caso, es la cuarta del ranking
nacional: en la estación meteorológica del aeropuerto se han anotado 28,8 litros por metro cuadrado
de precipitación acumulada -con datos hasta las 09.10 horas-. Le siguen
muy de cerca Castro Urdiales, con 26,5 litros, o Treto (Bárcena de
Cicero), con 26,2. Esta borrasca atlántica ha traído, además, un
desplome de los termómetros, y también en esta variable Cantabria ha
destacado entre los primeros puestos: en Alto Campoo a las 06.00 horas
solo había 1,1º.
La mañana seguirá siendo complicada en el litoral cántabro, pues las alertas amarillas por fuertes rachas de viento
(de hasta 90 km/h) y por fuertes precipitaciones (se esperan 15 litros
por metro cuadrado en una hora, o 40 litros en 12 horas) permanecerán
activadas hasta la una de la tarde. En la mar, el aviso sigue en su
nivel naranja hasta las once de la noche (después bajará a amarillo),
por viento del oeste de fuerza 8, mar combinada del oeste o noroeste de 5
a 6 metros, aumentando temporalmente a 6 a 7 metros.
Las olas han alcanzado 11 metros a 22 millas
La boya
meteorológica 'Augusto González Linares', del Instituto Español de
Oceanografía (IEO), ubicada a 22 millas al norte de Cabo Mayor
(Santander) y a una profundidad de 2.850 metros, ha registrado a las
7.00 horas de este viernes un altura máxima del oleaje de 11,02 metros.
El último valor disponible hasta el momento, correspondiente a las 8.00
horas, era de 9,3 metros.
El Ayuntamiento de Santander ha activado
este viernes el dispositivo preventivo por alerta naranja en la costa,
establecida entre las 09.00 y 22.00 horas, franja horaria en la que
quedará cerrado al tráfico y a los peatones el tramo final de la avenida
de Manuel García Lago. El perímetro de seguridad en este paseo se
ampliará en las horas previas y posteriores a la pleamar -prevista para
este mediodía a las 12.14 horas-, permitiendo únicamente el acceso a
residentes a sus garajes, así como a usuarios del hotel Chiqui, que
podrán estacionar dentro del recinto hotelero.
Con este mal tiempo, han ocurrido bastantes incidencias, algunas de ellas aparatosas,
aunque ninguna grave. El Centro de Gestión de Emergencias 112 del
Gobierno de Cantabria ha coordinado, entre las 18.00 horas de ayer y las
06.00 horas de hoy, 29 intervenciones derivadas de las 77 llamadas
recibidas en relación al fuerte viento que ha azotado Cantabria.
Los incidentes gestionados se corresponden con caída de árboles y ramas;
desperfectos o desplazamiento de mobiliario urbano, y pequeños daños en
infraestructuras (desprendimiento de cascotes de fachadas y cornisas,
canalones sueltos, tejas con riesgo de caída, rotura de antenas o daños
en ventanas y persianas, entre otros de similares características). La
mayor parte de ellos se han registrado en localidades de litoral y su
área de influencia, y no han provocado daños en personas.
La
intensa lluvia ha dejado solo una llamada y una incidencia gestionada
por la inundación de una vivienda como consecuencia de obras en el
tejado en Santander.
Los bomberos de la capital cántabra han tenido una noche ajetreada,
con una decena de intervenciones en la ciudad, todas relacionadas con el
viento: árboles caídos, un poste de la luz derribado, persianas y telas
asfálticas sueltas en tejados, y un cartel y un andamio que hubo que
asegurar.
En Sierrapando (Torrelavega) se han registrado rachas de
77 kilómetros por hora; en Tresviso y San Vicente de la Barquera de 74,
y en Castro Urdiales de 73 kilómetros por hora.
Previsión para el fin de semana
La lluvia y el viento, protagonistas
Las previsiones meteorológicas hablan de ligera mejoría a
partir de mañana sábado, si por esto se entiende que se desactivan las
alertas (la de oleaje no, pero sí las de lluvia y viento). Pero los
aguaceros y el viento seguirán recordándonos que estamos en otoño. Hoy viernes,
lo más destacado son las precipitaciones localmente persistentes en el
tercio norte, las rachas de viento muy fuertes en el litoral y en las
zonas altas y el notable descenso de las temperaturas máximas.
Mañana sábado
notaremos una importante subida de las temperaturas (se esperan hasta
20º), pero el viento seguirá azotando la región. Según Aemet, el cielo
estará nuboso o cubierto con precipitaciones generalizadas y
persistentes en el tercio norte, menos probables y en general débiles en
el tercio sur y que serán más intensas al principio y al final del día,
cuando no se descarta que en el extremo noreste sean localmente fuertes
y vayan acompañados de tormenta. Temperaturas mínimas con pocos
cambios. Máximas en ascenso, localmente notable en el extremo sur.
Viento del oeste y noroeste, flojo en el interior salvo algunos
intervalos más intensos durante las horas centrales, y con intervalos
fuertes en el litoral. Se esperan rachas muy fuertes de viento en el
litoral y zonas altas del este durante la segunda mitad del día.
En cuanto al domingo:
seguiremos con cielo nuboso o cubierto, disminuyendo a intervalos de
nubosidad baja. Llluvias y chubascos generalizados la primera mitad del
día, localmente persistentes en la mitad norte, que irán disminuyendo a
lo largo del día. Temperaturas con cambios ligeros. Viento del noroeste
girando a norte flojo, con intervalos fuertes al principio en el
litoral.