viernes, 16 de diciembre de 2016

MAXIMA ALERTA POR TEMPORAL EN LA COMUNIDAD VALENCIANA

Emergencias activa un aviso especial por precipitaciones de 200 litros, rachas de viento de 80 km/h y olas de cuatro metros en el litoral
Los últimos episodios de lluvias intensas en la Comunitat podrían ser sólo la antesala de lo que se espera este fin de semana. Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) hablan un temporal que arrancará hoy por la tarde, durará hasta el lunes próximo y podría descargar en algunas zonas hasta 200 litros por metro cuadrado. Es más de la mitad del promedio habitual de lluvias en un año en la Comunitat (475 litros por metro cuadrado). Y la cifra se aproxima a los 340 litros caídos durante este año en Valencia y su área metropolitana. En otros puntos, como el sur de Alicante, la cantidad de lluvia anual podría incluso superarse.
En esta ocasión, la zona más crítica en cuanto a lluvias será la mitad sur de la región. El rasgo más crucial va a ser la persistencia, aunque no se descarta que sean torrenciales en algunas áreas. Y con máxima atención a lo que suceda en el litoral, donde a partir de mañana se avecinan rachas de viento de hasta 80 kilómetros por hora y olas de cuatro metros. Para esta jornada se ha activado la alerta naranja por oleaje en toda la costa de la Comunitat.
En definitiva, podría tratarse del episodio de lluvias más intenso tras los últimos años de sequía y Emergencias ha lanzado un aviso especial para evitar incidentes graves. En concreto, recomienda a los ayuntamientos que estén muy pendientes de las alertas meteorológicas en sus áreas. Y pide a las localidades costeras «extremar la precaución ante vientos del este muy fuertes» y situaciones de «mala mar». También hay consejos a la población como «proteger viviendas ante la posible invasión del agua del mar» o el riesgo de evacuaciones en campings. Al mismo tiempo, se pide «no acercarse a paseos marítimos, espigones o acantilados».
En cuanto a la navegación, Emergencias reclama no practicar deportes náuticos y amarrar embarcaciones «en lugar resguardado». La Autoridad Portuaria de Valencia no descartaba interrumpir el tráfico marítimo si la situación en los próximos días se torna especialmente crítica en el Mediterráneo. De hecho, la alerta naranja por temporal marítimo también afecta a Baleares.
Las advertencias a los residentes en la Comunitat llegan también desde la Dirección de Protección Civil y Emergencias, dependiente del Ministerio del Interior. Ante los vientos costeros, «procure alejarse de la playa y de otros lugares bajos» que pueden «resultar afectados por las elevadas mareas y oleajes». También se pide no estacionar en zonas próximas al mar por «condiciones extraordinarias que pueden llegar a arrastrarle». Y hay un mensaje claro para curiosos o aficionados a la fotografía: «No ponga en riesgo su vida ante las imágenes espectaculares del oleaje». Mientras, el Gobierno aconseja a los conductores «disminuir la velocidad, no detenerse en zonas con gran cantidad de agua» como ramblas, cauces o barrancos y «circular preferentemente por carreteras principales y autopistas».
En caso de lluvia torrencial, el consejo es «no atravesar con el vehículo ni a pie los tramos inundados y buscar los puntos más altos de la zona». Ante las fuertes rachas de viento, Interior recomienda «asegurar puertas, ventanas y objetos que puedan caer a la calle», además de «alejarse de cornisas, árboles, muros, edificaciones en construcción o grúas que puedan desprenderse».
Bomberos y policías en alerta
Los cuerpos de bomberos y policía también han preparado dispositivos especiales ante la magnitud esperada del temporal. Por ejemplo, el Consorcio Provincial de Castellón tendrá operativos sus cuatro parques de bomberos de Benicarló, Oropesa, Nules y Segorbe, además de los cinco de bomberos voluntarios repartidos por la provincia. Hay 52 equipos de achique preparados para actuar y también estarán listos para ser movilizados los especialistas en rescate acuático y en montaña.
En Valencia, la Policía Local ha elaborado un completo plan de prevención con avisos a todas las unidades de distrito. Los agentes deberán supervisar los imbornales y sistemas de desagüe, los toldos, vallas y muros en mal estado, elementos sueltos de las fachadas o árboles y ramas con peligro de desprenderse. También vigilarán los pasos inferiores que podrían inundarse.
Habrá un especial control ante el riesgo desbordamientos en puntos como la acequia de Vera, Carpesa, San Miguel de los Reyes o el margen izquierdo del antiguo cauce, entre otras zonas críticas. También se ha previsto un reparto de 292 vallas y 18 balizas luminosas de señalización, empleadas para cortar calles o advertir de zonas de peligro.

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