Alfred Milán, el empresario de Cunit (Tarragona) que desapareció el martes entre Ibiza y Formentera en un kayak, era un nadador muy experimentado. A pesar de los días transcurridos desde que un temporal hizo volcar su embarcación, la familia se aferra a que su excepcional forma física le ayudés a alcanzar la costa.
Los equipos de rescate sostienen que es prácticamente imposible encontrarlo con vida, pero su esposa pide que no se abandone la búsqueda todavía. En ella participa Salvament Marítim, que ha destinado el buque ‘Marta Mata’ y el ‘Salvamar Markab’. También ha participado un avión Sesemar 101, el Grupo Especial de Actuaciones Subacuáticas (GEAS) y un helicóptero de la Guardia Civil. Los bomberos y los efectivos de protección civil de Formentera han rastreado la costa sin éxito durante tres días.
Alfred Milán salió de Ibiza a las 8:30 h de la mañana del martes y dos horas y media después llegó al puerto de la Sabina en Formentera. Tenía una cita con un conocido y después de almorzar llamó a su esposa para anunciarle que salía de regreso. Eran las 2:30 h de la tarde. Las condiciones eran muy buenas y él calculaba llegar a Ibiza en apenas una hora y media. Esto suponía navegar a cuatro nudos por hora, una velocidad muy alta.
A la altura de Els Freus, el paso entre Ibiza y Formentera, donde las corrientes son muy fuertes, se levantó un temporal con olas de hasta seis metros que volcaron el kayak. Todo indica que Milán perdió la pala y fue incapaz de recuperar la embarcación, que ha aparecido a unas 20 millas al este del cabo de la Mola.
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