Más de 1.000 personas han participado a lo largo de la última semana en el operativo que mantiene el puesto de mando en el entorno de la cabaña del Teju
Ya son ocho las jornadas de búsqueda del campurriano Alejandro Mencía. De forma exhaustiva y con numerosos medios y personas se recorre, día a día, un amplio radio entorno al lugar el que desapareció este vecino de Soto, la cabaña del Teju, en Fuentes. Más de 300 personas se sumaron ayer a "un operativo ejemplo de solidaridad y buena disposición", señaló la consejera de Presidencia, Paula Fernández, que estuvo en la formación de los grupos y en el inicio de las labores de rastreo.Fernández Viaña consideró "extraordinaria" la respuesta de muchas personas que se han sumado a lo largo de la semana al operativo que coordina su departamento (unas 1.000 personas).
"Quiero destacar la solidaridad de los vecinos del municipio y de las personas, que desde el minuto uno se han volcado por intentar actuar como voluntariado en la búsqueda", sobrayó la consejera, quien se ha mostrado esperanzada de obtener resultados.
Durante el día de hoy, efectivos de Cruz Roja, en virtud de un convenio con el Ejecutivo regional, han canalizado y gestionado la incorporación de los nuevos voluntarios, vecinos, familiares y amigos, que se han sumado a los distintos grupos de búsqueda que se han formado para peinar la zona.
El Puesto de Mando Avanzado (PMA) se ha ubicado por segundo día consecutivo en la zona de la cabaña del Teju, tras una jornada, la del viernes en Argüeso.
Desaparición
La desaparición tuvo lugar el pasado sábado por la noche en el entorno de la cabaña del Teju, en Fuentes (Hermandad de Campoo de Suso), después de bajar al río con un compañero para lavar unas prendas de ropa. Al subir, se vieron sorprendidos por una intensa niebla, lo que pudo haberle desorientado y separado de su compañero que si llegó a la cabaña.
Cuando se percataron que ya no era un simple retraso, buscaron por sus propios medios durante bastante tiempo, si bien finalmente llamaron al Centro de Atención de Emergencias 112 a la 1:17 horas, tras lo cual se movilizó un dispositivo formado por técnicos de la Dirección de Interior autonómica, agentes de la Guardia Civil y del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de este mismo cuerpo.
También se desplazaron esa noche al lugar de la desaparición bomberos autonómicos del parque de emergencias de Reinosa, así como el equipo de drones con el que cuenta la Comunidad Autónoma, que sobrevolaron durante la noche con cámaras especiales para detectar las diferencias térmicas, pero sin ningún resultado. Lo han seguido haciendo durante varias jornadas, aunque ya se han retirado.
Al operativo, coordinado porl a Dirección General de Interior de la Consejería de Presidencia y la Guardia Civil, se han sumado desde el propio domingo unas 1.000 personas, entre voluntarios de Protección Civil de varias agrupaciones, unidades caninas y muchos los vecinos, campurrianos y cántabros en general, que colaboran en las batidas.