Según informaron medios locales, el cuerpo sin vida del ciclista, de unos 50 años, fue localizado durante la tarde de hoy, horas después de que fuera encontrada su bicicleta.
Varios testigos vieron la tarde del sábado cómo la corriente arrastraba al hombre mientras intentaba circular por la carretera que une las localidades de Albergaria-a-Velha y Cacia, en el distrito de Aveiro.
Efectivos de la Guardia Nacional Republicana, de Protección Civil y de los bomberos participaron en la búsqueda del desaparecido, en la que también se utilizaron dos lanchas y una moto acuática.
El temporal de fuertes lluvias y vientos que ha afectado el norte y el centro de Portugal durante este fin de semana todavía mantiene en alerta roja a siete distritos debido al riesgo de agitación marítima, con olas de hasta 14 metros.
Aunque hay zonas que permanecen inundadas, ya se han reabierto a la circulación la mayoría de las carreteras y líneas ferroviarias que permanecían cortadas desde el sábado.
Hay anguilas y peces en los claustros del Monasterio
En Coimbra, las terrazas del parque verde vuelve a estar sumergidos, el Mondego riega volvió a inundar el Monasterio de Santa Clara-a-Velha, el campo de golf en la Quinta das Lágrimas se transforma en una gran piscina y algunas calles están cortadas al tráfico.
Graciete, 88, agarra una escoba para remover la gira de lodos por delante de su casa, ya que lo peor parece haber pasado.
"Durante mucho año en el que no hay agua aquí", dijo Lusa el
octogenario, que dice que las inundaciones son ya "casi en un hábito. No
es la primera ni la segunda, ni la tercera."
Aunque el agua está latiendo en la acera frente a su casa, cerca de la
entrada al centro de museo del monasterio, la situación no es similar a
un pasado lejano, donde Graciete, su marido y sus hijos tenían que
saltar de uno. piso de la casa "para un barco."
María José Nascimento, a vivir en una casa con un balcón con vistas al monasterio, que tuvo una noche de insomnio.
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