Un millar de desalojados, casas quemadas y 3.000 hectáreas arrasadas en la provincia de Valencia por los incendios
El incendio de Carcaixent, que ha quemado más de 1.200 hectáreas, ha destruido chalés y ha obligado a desalojar a centenares de vecinos, está bajo control, según ha informado esta misma mañana el Ayuntamiento de Carcaixent. ''La situación del fuego está bajo control'', aseguran en un comunicado hecho público a las 7.30 horas, con 2 puntos inestables: uno en el origen del fuego en Montecampo y el otro en el Molló, arriba de la Font de la Parra. Se está trabajando en reforzar estas dos zonas con los medios aéreos'' que se han incorporado a primera hora de la mañana.
La zona recreativa del Paratge de l'Hort de Soriano, así como la cas, no se han visto afectadas, según el Ayuntamiento. ''Las llamas sí que han llegado a la zona montañosa que hay dentro del paraje. El Barranc de la Font i el Barranc de Timora también se han visto afectados'', informan.
Continuán cerradas las carreteras cortadas ayer (La Barraca, Sant Blai i Camí la Font) por orden del jefe del operativo para poder facilitar el acceso de los vehículos de emergencia. También se mantienen los desalojos hasta nuevo aviso.
1.200 hectáreas afectadas
Pese a las buenas noticias que llegan desde Carcaixent, lo cierto es
que la Comunitat parece condenada a que la historia se repita. Como
sucedió en 2012 con los devastadores incendios de Cortes de Pallás y
Andilla, la provincia de Valencia estaba ayer cercada por cuatro
incendios forestales. Las llamas de Carcaixent, Bolbaite, Terrateig y
Benifairó de les Valls han arrasado casi 3.000 hectáreas, han quemado
chalés y han obligado a alrededor de 1.500 vecinos a dejar sus casas,
según la Generalitat. El dispositivo de extinción logró poner freno a
los tres últimos fuegos en una durísima jornada, sin embargo el temor
seguía ayer en La Ribera. El más grave, el de Carcaixent, continuaba
fuera de control.Los mayores problemas se centraron en La Ribera, a causa del fuego que arrancó el jueves por la tarde y se extendió hacia la Barraca d'Aigües Vives. Las llamas han quemado casas aisladas y han obligado a desalojar a casi un millar de vecinos, con un balance provisional de más de 1.200 hectáreas afectadas.
La madrugada en esta zona fue de alta tensión, con la evacuación del hospital de la Barraca y la urbanización Santa Marina. Carcaixent, y sobre todo la Barraca d'Aigües Vives, vivieron la noche con el temor de que el fuego pudiera llegar hasta el casco urbano. El trabajo de los bomberos impidió daños mayores. Durante la noche fueron desalojadas unas 500 personas. Además, en la jornada de ayer, las 31 personas que fueron desalojadas del Hospital de la Barraca en la noche del jueves permanecían en tres centros sanitarios: 6 en el Hospital Lluís Alcanyís de Xàtiva, 13 en el Hospital Universitario de la Ribera en Alzira y los 12 restantes en el 9 d'octubre en Valencia.
Durante toda la mañana de ayer, la principal preocupación era que las llamas pudieran saltar la carretera CV-50, llegar hasta el término de Alzira y afectar a parajes como la Murta, la Casella y les Valletes de Bru.
La carretera CV-50 entre Alzira y Tavernes permaneció cortada durante todo el día. Asimismo, las clases en colegios como el British School o el de la Barraca se vieron suspendidas debido a la cercanía del incendio
A primera hora de la tarde de ayer, la alarma, con el cambio del viento, se desplazó hacia Carcaixent. Las urbanizaciones de San Blas y Tiro al Pichón fueron desalojadas por precaución al contar sólo con una carretera de acceso. De este modo, otras 400 personas tuvieron que desplazarse. Unos minutos después también se desalojaba la urbanización Los Amigos. En la zona se encuentra una residencia de personas mayores Virgen de Aguas Vivas. Los 29 ocupantes, algunas de ellas con problemas respiratorios, fueron trasladadas hasta la residencia de Carlet. El fuego también amenazaba a l'Hort de Soriano, un paraje natural también muy querido. Al cierre de esta edición, sin embargo, había un cierto optimismo por la evolución del viento.
Tanto en Carcaixent como en municipios cercanos como Alberic, se pidió a los vecinos que se mantuvieran en sus casas con las puertas y ventanas cerradas debido al humo.
Mientras, el fuego que comenzó en Bolbaite el miércoles siguió avanzando hasta alcanzar Sumacàrcer. Por el momento se contabilizan más de 1.500 hectáreas afectadas y unas 200 personas evacuadas de manera preventiva. Al cierre de esta edición, estaba prácticamente controlado.
El incendio de Terrateig
Mucha menor gravedad revistió el incendio que, casi al mismo tiempo que el de Carcaixent, se declaró en Terrateig, en la Vall d'Albaida. El fuego arrasó unas 20 hectáreas entre este municipio y Llocnou de Sant Jeroni. En esta ocasión no fue preciso activar desalojos y Emergencias lo dio por controlado ayer.
En plena madrugada, las llamas volvieron a aparecer en el norte de la provincia. Y de nuevo bajo la sombra de la intencionalidad. A las 6.30 horas, se declaró otro incendio forestal en Benifairó de les Valls. En esta ocasión, el fuego obligó a evacuar a 250 alumnos del colegio del Colegio Adventista de Sagunto. Según Emergencias, el siniestro estaba ayer «estabilizado».
Durante toda la jornada, casi un millar de efectivos trabajaron en la extinción: pilotos, bomberos, brigadas. Hasta l'Albufera se convirtió en punto de abastecimiento de agua. CSI-F denunció la «precariedad de medios» de los agentes medioambientales y la Unió y los clubes de caza afectados reclamaron ayudas por los cultivos y cotos afectados.
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