INCENDIO DE ARTANA SIGUE SIN CONTROL

Hasta 30 medios aéreos de distintas comunidades autónomas participaron en las tareas de extinción y cerca de 400 efectivos fueron movilizados

El incendio forestal declarado a primera hora de la tarde de ayer en un paraje montañoso de Artana ya ha quemado más de 1.000 hectáreas y sigue sin control, según fuentes oficiales. El fuego alcanzó las primeras estribaciones del parque natural de la Sierra de Espadán y avanza con gran virulencia a pesar de que se movilizaron hasta 30 medios aéreos, entre helicópteros y avionetas, los once que dispone la Generalitat, dos del Ministerio de Medio Ambiente y los restantes procedían de otras regiones de España.
Los medios aéreos han comenzado a reincorporarse a primera hora de la mañana a las tareas de extinción. Además, tres medios de este tipo se han desplazado hacia otro fuego activo desde anoche en la Comunitat Valenciana, en este caso en Tavernes de la Valldigna (Valencia), informa el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat. Está previsto que sobre las 10.00 horas el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, acuda al Puesto de Mando Avanzado para conocer de primera mano y sobre el terreno la situación.

Virulencia de las llamas y cenizas en los pueblos

El incendio se inició minutos antes de las 15 horas a unos dos kilómetros al norte del casco urbano de Artana, y fue un particular el que llamó al 112 al ver el humo. La virulencia de las llamas levantó una densa columna de humo, que era visible desde varios puntos del interior de la provincia de Valencia y Castellón. «La nube de humo era muy grande y caían cenizas», afirma Eva, vecina de Eslida, una de las localidades amenazadas por el incendio.
Además de los medios aéreos, en las labores de extinción participaron también 10 unidades de bomberos forestales con ocho autobombas y cuatro camiones nodriza con capacidad de hasta 35.000 litros de agua. José María Ángel Batalla, director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, solicitó el apoyo de medios aéreos de otras regiones para ayudar en las tareas de extinción. Se desplazaron dos Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), una procedente de Cuenca y otra de Zaragoza. También llegaron dos aviones anfibios de Reus.
Además, fueron movilizados cerca de 400 efectivos para combatir las llamas y también se precisó la actuación de la Unidad Militar de Emergencias (UME). «Lo principal es evitar que se propague por la Sierra de Espadán», afirmó Ángel, quien además aseguró que las poblaciones más cercanas «no han sido afectadas», y que no «se ha desalojado ninguna vivienda». Pese a ello, se mantuvo la alerta ante un posible avance de las llamas que obligara a una evacuación.

El fuego iniciado en el límite del parque natural de la Sierra de Espadán registró dos flancos, uno de ellos se dirigió a la localidad de Eslida mientras el otro se acercaba al pueblo de Betxí. Fue el primer flanco el que más alarma desató debido a la proximidad del parque natural.
Es en este frente fuego se centró la actuación de los medios aéreos, que fueron claves. El incendio se inició en una zona con vías de difícil acceso para los equipos de los bomberos. «La zona está en mal estado y tiene pocos caminos transitables», asegura Juanvi, un vecino que organiza excursiones por el parque natural.
Para coordinar todos los esfuerzos en la extinción del incendio se montó en el polígono industrial de Artana el puesto de mando avanzado. «La actuación de los bomberos ha sido rápida», comentó uno de los vecinos. «Llegaron los helicópteros enseguida», añadió.
Según los vecinos de Artana, se trata de una zona de montaña que «no está limpia». Este hecho podría haber agravado el incendio. «Se va a quemar lo más precioso que tenemos», lamentó Ximo, vecino de la localidad, ante el avance descontrolado del fuego. La Sierra de Espadán es un parque natural con abundante población de alcornoques, además de pinos, por lo que el daño ecológico puede ser muy grande.
Al cierre de esta edición, el incendio aún seguía fuera de control y los equipos de bomberos seguían luchando para que las llamas no se propagaran por el parque natural. Las causas del fuego, que al parecer se inició junto a un camino, no estaban claras, según fuentes policiales.
En abril de este mismo año se registró otro incendio en la zona. El fuego se originó en un campo de cultivo abandonado cerca de la población de la Alcudia de Veo. La actuación de los bomberos evitó que el incendio se propagara y fue extinguido en poco tiempo.