El siniestro ya no presenta llamas en el perímetro y la delegada del Gobierno pide «prudencia» respecto a las sospechas de la autoría de un fuego «con factor humano» como detonante
Por el buen camino. La lucha contra el incendio declarado el jueves en Motitxelvo y que ha arrasado 2.500 hectáreas avanza a buen ritmo y los bomberos ya lo han dado por estabilizado, es decir, sin avance del fuego y con un perímetro que no crece.
Es la última hora de un fuego que, en su momento crítico, provocó el desalojo de 850 personas y el confinamiento de 6.000 tras avanzar por siete municipios de La Safor y la Vall d'Albaida. A primera hora de la tarde, se ha autorizado el regreso a sus hogares de los vecinos desalojados en Ador, la Ermita de Ador y las urbanizaciones de Monte Corona, también en Ador, y La Corona, en Villalonga. Tras esta decisión, ya no quedan personas trasladadas.
Además, sobre las 17 horas se ha informado de la desmovilización de la UME, con lo que comienzan a retirarse los militares que han apoyado las tareas.
Por la mañana, el incendio ya presentaba una evolución favorable, tras una noche sin incidentes reseñables. Las zonas más complicadas en el arranque del día eran «la cabeza del incendio y el flanco derecho», según el 112. En esos momentos no había llama en el perímetro, aunque seguían detectándose puntos calientes sobre los que trabajar con mayor intensidad.
Los equipos han aprovechado las «ventanas de oportunidad» en las que el viento amainaba para intensificar el trabajo de los medios aéreos. Al mismo tiempo, se ha trabajado con maquinaria habilitando accesos.
La jornada ha arrancado con peligro extremo de incendios forestales en el interior de Valencia y Castellón y en la provincia de Alicante. También con riesgo a causa del viento en el interior de Valencia y Castellón: previsión de rachas de hasta 80 k/h. Pero con el paso de las horas, el viento ha amainado y a 13 horas ha finalizado la emergencia por este fenómeno en la Comunitat y también las alertas de temporal costero.
La mejora del tiempo ha permitido que el incendio fuera atacado desde el aire. Desde las 8.30 horas han trabajado dos vuelos de extinción junto a los más de 300 efectivos desplegados para frenar el avance del fuego y reducirlo.
Una cifra resume la importancia de las aeronaves: sólo el sábado realizaron 139 descargas que sirvieron para contrarrestar los puntos calientes. El sábado, por la noche un bombero forestal tuvo que ser atendido en el centro de salud de Ador por herida en un ojo.
Emergencias harestringido el tránsito por el perímetro del incendio y las zonas circundantes para no dificultar el trabajo de las máquinas junto al monte. También han pedido evitar actividades de ocio como senderismo, motociclismo o turismo de montaña. «Puede resultar muy peligroso ya que aún existen puntos calientes y pueden darse reactivaciones». Mientras, la carretera CV-685 ha permanecido cerrada en un tramo próximo al perímetro.
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