Renfe establece un plan de transporte alternativo por carretera para los trenes de media distancia.
Los de largo recorrido se desvían por Santiago
Sobre las 16.30 horas del viernes se interrumpió la circulación ferroviaria a la altura de la estación de Frieira (Crecente), en la línea Vigo-Ourense que circula en paralelo al río Miño, por un desprendimiento que provocó el desguarnecido de la vía y un amplio socavón. En una primera valoración, los técnicos estiman que la reparación de este tramo puede durar varios días, incluso una semana, según otras fuentes. Afortunadamente, el suceso, que se achaca a las fuertes lluvias de estos días, no se produjo mientras circulaba un tren por esta zona, por lo que no hubo que lamentar otro tipo de daños. El ADIF informará de los plazos para el restablecimiento de la circulación cuando los técnicos valoren con más precisión el alcance de los daños, aunque una fuente oficial aseguró que esperan arreglar el socavón «a lo largo del fin de semana», con el fin de restablecer la circulación ferroviaria.
Renfe ha establecido un plan de transporte alternativo por carretera para los trenes de media distancia, mientras que los de larga distancia que circulan por esta línea seguirán la ruta alternativa por Santiago que ya utiliza el nuevo tren madrugador que sale de Pontevedra con destino Madrid.
Las imágenes de la vía dañada, situada en el kilómetro 95,500, demuestran que parte de los raíles se quedaron en el aire, al igual que parte de los soportes de una pasarela peatonal de la estación. Será necesario reforzar la plataforma ferroviaria en este tramo de unos diez metros, de ahí que las previsiones para reabrir la línea no sean optimistas.
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