Las precipitaciones vuelven a causar problemas en las carreteras del
norte de Huesca y han obligado a cortar el servicio de tren entre
Sabiñánigo y Canfranc. La alerta continúa activada y este lunes se
esperan 25 cm más en el Pirineo más occidental.
La borrasca Dora dejó este domingo y en la noche de este lunes fuertes nevadas en el Pirineo oscense, especialmente en los valles de Aragón y Tena,
donde los quitanieves se han tenido que emplear a fondo para garantizar
la circulación, aunque el volumen de tráfico en este puente esté siendo
muy inferior al de otros años por el confinamiento provincial y también
por el temporal. Aún así, este lunes por la mañana se encuentra
cortado el paso para camiones en la A-23 entre Nueno y Sabiñánigo en el
puerto de Monrepós, donde han comenzado a embolsarse los camiones
afectados. Para el resto de vehículos es necesario el uso de cadenas en este punto.
La nieve ha hecho acto de aparición también en las últimas horas también en Ribagorza, donde
ha dejado un manto blanco en todo el territorio comarcal
excepcionalmente más intenso en la zona sur que en el norte pirenaico.
Así, localidades sureñas como Graus o Benabarre se han despertado con espesores de nieve de hasta cinco centímetros mientras que en Benasque o Castejón de Sos estaba nevando de una forma bastante más suave y estos espesores escasamente alcanzaban uno o dos centímetros de potencia.
Tal ha sido ya la cantidad acumulada en estas jornadas que los visitantes de Formigal, por ejemplo, se han encontrado algunas terrazas que acumulaban varios centímetros de nieve sobre sus mesas.
Cortado el canfranero y cadenas en carreteras
Las condiciones meteorológicas sí han obligado a Adif a interrumpir el servicio ferroviario entre Sabiñánigo y Canfranc. Para garantizar la movilidad de los viajeros afectados, Renfe ha habilitado un servicio alternativo por carretera entre ambas estaciones. En el resto del recorrido, Zaragoza–Sabiñánigo, se presta el servicio habitual en tren.
En cuanto a las incidencias en las carreteras, a primera hora de este lunes era necesario el uso de cadenas
en numerosas vías pirenaicas: la N-330b en Aínsa, la N-330a en Canfranc
Estación, la A-2606 a la altura de Formigal, la A-1604 en Sabiñánigo,
la A-136 en Biescas, la A-1602 en Berdún, la A-2605 en Jasa, la A-23 en
Sabiñánigo y en Nueno, la HU-212 en Aragués del Puerto, la HU-211 y la
HU-210en Hecho, la A-176 en Puente de la Reina, la A-2613 en Lascuarre,
la N-260 en Fiscal, la A-1603 en Santa Cruz de la Seros, la N-260a en
Broto, la A-132 en Bailo, la A-176 en Hecho, la N-240 en Jaca, la A-21
en Santa Cilia, la A-1602 en Ansó, así como la A-1205y la A-2605 en
Jaca. (Consulte aquí las carreteras afectadas).
Riesgo de aludes
Estas intensas precipitaciones, unido al fuerte viento, han elevado el nivel de riesgo de aludes a notable (3 sobre 5)
por encima de los 2.000 m en Jacetania, de los 2.200 en Alto Gállego y
de los 2.400 en Sobrarbe. En estos sectores más occidentales, los
espesores rondaban este domingo el medio metro a 1.800 m, tras los 25 cm caídos en las últimas 24 horas.
Además, las previsiones indican que este manto irá creciendo ya que la Aemet mantiene activados para este lunes y martes los avisos por nuevas nevadas con la cota subiendo de 800 a 1.200 m. Estas podrían dejar otros 25 cm de media en Jacetania y Alto Gállego, y de 5 a 10 en Sobrarbe y Ribagorza. También hay avisos para las Cinco Villas (4 cm) y el norte de la Hoya de Huesca (2 cm).
Todo ello agravará el peligro ya que el simple paso de un esquiador de montaña podrían producir aludes de tamaño 3 (suficiente para destruir un coche o un edificio pequeño) por encima de 2.000 m.
Desde
el refugio de los Ibones de Bachimaña, por ejemplo, han advertido a los
montañeros de este riesgo recordándoles la necesidad de llevar arva, sonda, pala, crampones, piolet y casco si quieren realizar alguna travesía por la zona.
Estas nevadas están dejando también importantes espesores en las estaciones de esquí. En Candanchú, por ejemplo, este domingo al mediodía tenían ya 50 cm en la base y 90 en cotas altas. En el caso de Aramón, Formigal contaba con 48 cm en la zona de Anayet a media mañana, mientras que en Cerler sumaban unos 20 o 25 cm.
El Espacio Nórdico de Llanos del Hospital de Benasque ha podido estrenar la temporada de esquí en Aragón ofreciendo seis kilómetros de pistas para los aficionados al fondo. Tiene previsto abrir el hotel el próximo día 11.
En el resto de Aragón, la Aemet prevé precipitaciones ocasionales con una cota de nieve de entre 900 y 1400 m en la Ibérica y rachas de viento de hasta 80 km/h en Albarracín y Jiloca.
Las temperaturas irán en ascenso en Teruel y Zaragoza y con pocos
cambios en Huesca. Por capitales, oscilarán entre los 3 grados de mínima
y 8 de máxima de Huesca; los 1 y 9 de Teruel y los 5 y 14 de Zaragoza.
De cara al martes, último día de puente, se esperan intervalos nubosos, sin descartar precipitaciones débiles y dispersas en Teruel y la Ibérica de Zaragoza. Temperaturas en descenso en Teruel y Zaragoza y con pocos cambios en Huesca.
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) ha activado los medios necesarios
para hacer frente a las nevadas que puedan producirse en las
comunidades de Aragón y Asturias, durante el temporal de nieve.