APERTURA DE PRESAS AGRAVA LAS INUNDACIONES EN TEXAS

• Las presas tienen que soltar agua para no desbordarse incontroladamente

• El número de evacuados asciende a 30.000, según la Agencia de Emergencias

• Harvey se dirige hacia el este y se esperan fuertes lluvias hasta el jueves

La apertura de las compuertas de dos presas cuyo caudal está a punto de desbordarse amenaza con agravar las inundaciones en la zona de Houston (Texas, EE.UU.) causadas por la tormenta tropical Harvey, y que han causado ya cinco muertos, miles de desplazados y graves daños materiales.

El Cuerpo de Ingenieros del Ejército ha anunciado la apertura de las compuertas en las presas de Addicks y Barker para aliviar los embalses, cuyo nivel ha aumentado rápidamente y amenazan con desbordarse. El agua desembalsada fluirá en Buffalo Bayou, el principal curso de agua que atraviesa la ciudad de Houston, e inundará las localidades cercanas.

"Si no empezamos a soltar ahora, el volumen de agua incontrolada alrededor de las presas será más alto y tendrá un impacto mayor en las comunidades cercanas", ha explicado el coronel Lars Zetterstrom, comandante del Cuerpo en el distrito de Galverston, citado por Reuters.

30.000 evacuados, 450.000 afectados

Decenas de miles de personas han abandonado sus casas en Houston y sus alrededores. Las autoridades locales han ordenado a 50.000 personas que abandonen el condado de Fort Bend, a 55 kilómetros de Houston, por el desbordamiento del río Brazos.

Por el momento, la Agencia Federal de Emergencias atiende a 30.000 personas en los centros de evacuación. La Agencia estima que 450.000 personas necesitarán algún tipo de asistencia.
La Agencia Meteorológica ha informado que Harvey se dirige lentamente en dirección este, aunque su curso exacto es difícil de precisar, por lo que se esperan fuertes lluvias en el sureste de Tejas y en el estado de Louisiana (la Casa Blanca ha aprobado la declaración de emergencia para este último).
La mayor intensidad de precipitaciones se espera entre el miércoles y el jueves, y la acumulación de agua puede superar los 1,27 metros.
Harvey, el peor huracán que ha golpeado Texas en los últimos 50 años, tocó tierra la noche del viernes y ha moderado paulatinamente su fuerza. Aún se mantiene como un ciclón muy peligroso, con vientos máximos sostenidos que alcanzan los 65 kilómetros por hora y lluvias torrenciales.