El Servicio Cinológico de Madrid desplazó a Chantada a los dos perros especialistas en la búsqueda de cadáveres sumergidos
Un equipo del Servicio Cinológico de la Guardia Civil,
procedente de Madrid, se ha unido desde este martes al dispositivo de
búsqueda formado por efectivos del Grupo de Actividades Subacuáticas de A
Coruña (GEAS) que rastrean las aguas del embalse de Os Peares,
concretamente en las proximidades de A Ponte de Portotide y río abajo,
tratando de localizar el cuerpo de Ernesto Manuel Torre Rodríguez, un
vecino de 76 años de Chantada, desaparecido desde el pasado 14 de mayo.
Indian y Clauss son los dos únicos perros en España
especializados en la búsqueda de cadáveres sumergidos con los que cuenta
el Equipo Cinológico de la Guardia Civil. Son de raza pastor belga y desde el martes rastrean esta zona del embalse de Os Peares
donde aparecieron las pertenencias de Ernesto Torre. «Vamos turnando a
los perros. Primero sale uno a rastrear y cuando se agota, sacamos al
otro», explica un agente del GEAS.
Se trata de unos canes especialistas que suelen
activarse cuando ya han pasado varios días de búsqueda sin resultados y
cuando el cuerpo, supuestamente, ya ha comenzado a descomponerse, para
que los animales puedan detectar el olor. Indian y Claus son los dos
perros españoles entrenados para la detección de cuerpos bajo el agua
hasta 50 metros.
Esta especialidad se creó a raíz del caso de Marta del Castillo,
ya que para buscar en el río Guadalquivir el cuerpo de la joven
tuvieron que desplazarse desde Holanda unos canes entrenados para esta
labor.
Durante el rastreo los perros van con un arnés en la
parte de la proa de la zódiac de la Guardia Civil acompañados por su
correspondiente guía. «Van olfateando la zona donde puede estar el
cuerpo del desaparecido y si perciben algo marcan el rastro», explica el
guardia.
El entrenamiento al que los someten sus guías les
permite oler los cuerpos y marcar la zona del pantano, río o embalse en
el que se encuentren. Lo único que no pueden hacer es encontrar cuerpos
en el mar, debido a sus características.
Modo de búsqueda
En el primer día de búsqueda, es decir, en la jornada
del martes, estos perros estuvieron rastreando esta zona del embalse
durante la mañana y la tarde. «Por la tarde, uno de los perros se puso
nervioso y marcó el rastro. Una pareja de buzos se sumergió al embalse,
pero finalmente ni rastro». Ayer rastrearon el entorno durante la
mañana, pero los animales no marcaron nada. GEAS y Equipo Cinológico
rastrearon las orillas del río y después se adentraron en el embalse
hasta cruzarlo. Llegaron a la zona donde aparecieron las pertenencias
del desaparecido. Pese a estar horas rastreando, ninguna novedad acerca
del desaparecido. Agentes y perros rastrearon las orillas del embalse,
buscaron a una profundidad máxima de 15 metros pero la busca se saldó
sin resultado. Hoy continuará la búsqueda.
En el lugar donde se encontraron las pertenencias del desaparecido, los
agentes detectaron en el propio embalse salientes grandes e indicaron
que no es una zona de corrientes. En cuanto a la visibilidad del
embalse, es reducida, de unos tres metros; algo que dificulta las
labores. Es una zona complicada, así que con la presencia de estos
perros especializados se intentará acotar la zona de actuación de los
buceadores para facilitar así los trabajos de búsqueda.
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